LA VISITA A FAUNIA- Álvaro
Hace tiempo que abrieron un Parque Temático dedicado a los animales, se llama Faunia y nunca había tenido el placer de visitarlo. Está en Vicálvaro y hemos ido con el centro Lescer, en concreto con el taller ocupacional del que Carol es la responsable. La visita, como todo aquello que se hace en nombre del centro Lescer, estaba muy bien organizada. Había que estar a las diez menos cuarto para marcharse con Alonso y algunos de sus secuaces, yo en concreto iba con Claudia.
A las once y cuarto llegamos a nuestro destino tras un trayecto que no pareció largo, básicamente porque no lo fue, apenas media hora el tiempo que hay entre el centro y Faunia.
Éramos 14 personas las que habíamos ido y esto que se ha podido leer, no es más que una pequeña introducción, la auténtica visita la relataré ahora.
Ya dentro, lo primero que hicimos fue ver a unos pequeños animalitos que se llamaban perros de la pradera que son muy parecidos a las ardillas.
Justo después fuimos a ver la exhibición de turno en la piscina que tiene cualquier lugar con animales acuáticos que se precie. Allí había un colegio con toda su chavalería. Al marcharse los críos, subieron a una foca a la que dimos de comer y nos hicimos fotos con ella, como si fuera un colega, o ¿quién no ha dado comida a un colega? Aquel fue el lugar en el que más se sintió que estábamos rodeados de animales. Ese lugar debería haber sido La jungla, pero ese sitio tenía de jungla el nombre, que fue la siguiente zona que vimos, eso si, tenía un aire a Parque Jurásico aunque muchísimo más cutre y pequeño. Allí de todas formas estuvimos poco tiempo y acto seguido estuvimos en el túnel de la evolución que te mostraba en homenaje a Darwin, la”mutación” que han sufrido los seres vivos con el paso de millones de años.
Poco antes de las 2, creo, el hambre llamaba a nuestro estómago y nosotros acudíamos a saciarla a un bar llamado El Olivo donde yo me tomé un bocadillo, la oferta era escasa, pero suficiente para la situación.
Al terminar nos preparamos para la vuelta, que, yo en particular hago con un secuaz diferente del anterior y en el regreso le doy la coña a Juan y me doy cuenta. Pero no paro, quizás sea por eso que dice Pepa, que estoy lleno de vida. Puede ser.
Álvaro de Andrés
